Con motivo de la procesión del conocido como Corpus Chico que cada año se celebra en el casco histórico del popular distrito del barrio sevillano de Triana, el domingo siguiente al jueves del Corpus, es habitual organizar por el ayuntamiento hispalense un concurso de altares entre los que tradicionalmente instalan en la calle distintas personas y organizaciones a lo largo del recorrido por donde ha de pasar el cortejo.
Así estaba adornada Triana, engalanada con altares, balcones y escaparates para recibir a su Divina Majestad en la Solemnidad del Corpus Christi. Todo un derroche de elegancia, arte y buen gusto para una ocasión tan señalada en el calendario cristiano con el que los vecinos, entidades y comerciantes del barrio se han volcado. La esplendorosa mañana que el domingo 23 de junio nos regalaba al barrio de Triana sirvió de marco excepcional para la celebración de una nueva edición del Corpus Chico. El Distrito, como de costumbre, organizaba el tradicional concurso de altares con la novedad de una nueva categoría de balcones.
Fotos Antonio Rendón Domínguez