El ex diestro estuvo acompañado de su hijo José Fernando, que viajó expresamente desde Irlanda, donde se encuentra estudiando, para estar con su padre.
Ortega Cano, muy recuperado físicamente, a su llegada al hospital de Sevilla en el que será intervenido de una reconstrucción de colon.
Ortega Cano ingresó el pasado sabado a las seis de la tarde en el hospital Virgen Macarena de Sevilla para ser intervenido de nuevo de la operación de colon a la que debería haber sido sometido el pasado mes de septiembre y que tuvo que ser aplazada debido a la aparición de un herpes zoster que afectó a las extremidades inferiores, la barbilla y gran parte de la espalda del paciente, además de darle fiebre muy alta, algo que hacía complicada la operación..La operación esta prevista para el lunes dia 31 de octubre , cinco meses despues del grave accidente. Ahora, recuperado de estas molestias, y con un mejor aspecto que en sus últimas apariciones,podra ser operado, A su llegada, el diestro tuvo solo estas palabras para la prensa: "Bueno, ahí vamos".
Acompañado de varios familiares y entre ellos de su hijo José Fernando, el maestro apareció en el centro médico tras unas semanas donde la polémica ha vuelto a salpicar a su familia, esta vez, debido al percance de tráfico protagonizado por su hermano Eugenio, que también se encuentra hospitalizado debido a un empeoramiento de su problema diabético.
En la trágica colisión, que costó la vida a Carlos Parra, Ortega Cano sufrió dos fracturas de fémur en su pierna izquierda, una fractura en el pilón tibial izquierdo y una fractura de peroné derecho. La recuperación es lenta y la movilidad del ex diestro se encuentra muy reducida por lo que se desplaza principalmente en una silla de ruedas, aunque ya es capaz de estar de pie y dar algunos pasos con ayuda de un andador.
A pesar de que José Fernando se encuentra actualmente estudiando en Irlanda, el joven no ha querido dejar solo a su padre en este momento, y llego a Sevilla la tarde del viernes, siguiendo asi con el comportamiento que adoptó para con su padre cuando sufrió el accidente de tráfico que le costó la vida a Carlos Parra. José Fernando ha iniciado su nueva vida en la localidad de Athlone, centro geográfico de Irlanda, dentro del condado de Westmeah, donde reside en un chalé pareado del condado de Westmeah junto a una familia y está matriculado en un colegio marista que cuenta con casi quinientos alumnos.
Precisamente debido a este percance, y en contra de los rumores que decían que José Fernando pretendía hacer uso de su herencia al cumplir la mayoría de edad para viajar hasta Colombia y buscar sus raíces, el mayor de los hijos del diestro y Rocío Jurado no se separó de su padre hasta hace unas semanas que tuvo que viajar a Irlanda para comenzar el nuevo curso.
Aún así y a pesar de la distancia, el joven ha estado pendiente de su padre en todo momento y muestra de ello es que no ha dudado en regresar a España para estar a su lado en estos días previos y probablemente en los siguientes a la operación.
Ortega Cano llegaba al Hospital con un semblante serio y preocupado ante su nueva intervención quirúrgica después de varios meses pendiente de dicha operación, y llevando a cabo una exhaustiva rehabilitación gracias a la que ha recuperado cierta movilidad en sus miembros inferiores.
Aún así, el diestro fue conducido al interior del centro hospitalario en una silla de ruedas bajo la atenta mirada de los familiares que le acompañaron y mientras su hijo se mantenía en un segundo plano, como suele ser habitual en él.
El torero además de ser intervenido del colón, todavía tendrá que pasar por quirófano en alguna ocasión más. La más cercana, en las próximas semanas, para reparar los daños que sufre en el nervio ciático de su pierna derecha.
Faro de Chipiona
