El acto, celebrado en el Pabellón de la Navegación, ha estado presidido por el consejero de Agricultura y Pesca. Las doce empresas que integran la Asociación Andaluza de Fabricantes de Salazones, Ahumados y otros transformados primarios de la Pesca manipulan 6.500 toneladas de salazones y 4.800 toneladas de ahumados, con un valor de producción superior a los 60 millones de euros.
Los empresarios de las Salazones y Ahumados de Andalucía han presentado en el Pabellón de la Navegación de Sevilla el distintivo que garantiza la extraordinaria calidad de su producción conservera. Este evento, presidido por el consejero de Agricultura y Pesca, Isaías Pérez Saldaña, ha contado con la participación del presidente de la Asociación Andaluza de Fabricantes de Salazones, Ahumados y otros transformados primarios de la Pesca, Juan Vázquez Malavé, el prestigioso historiador gastronómico Carlos Azcoytia, así como empresarios y profesionales de esta industria pesquera, responsables de compra de grandes superficies, y representantes de la Administración andaluza.
Anualmente, las doce empresas que forman parte de la Asociación manipulan alrededor de 6.500 toneladas de salazones y 4.800 toneladas de ahumados, con un valor de producción superior a los 60 millones de euros, lo que sitúa a esta actividad en un lugar destacado dentro de la industria de la conserva andaluza. Además, hay que añadir que todos los productos tienen una elaboración totalmente artesanal y natural, que continúa utilizando las técnicas que ya se empleaban en la antigüedad.
Por este motivo, la Asociación Andaluza de Fabricantes de Ahumados y Salazones, un ambicioso proyecto que cuenta con el apoyo de la Consejería de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía, tiene como uno de sus principales objetivos promover un sello que asegure la calidad de esta producción conservera. En este sentido, hay que destacar que los productos elaborados por la Asociación pueden acogerse al sello Calidad Certificada de la Junta de Andalucía.
Por otra parte, en el transcurso de esta presentación se ha inaugurado una exposición en la que se ha podido ver el origen y evolución histórica de las salazones, cuyas primeras industrias en Andalucía datan del siglo VII a.C. explotadas por griegos y fenicios, y cuyas técnicas artesanales de elaboración han llegado hasta nuestros días. En esta muestra se ha expuesto una reproducción del único documento existente en el mundo hasta la fecha, en el que se revela la fórmula del mítico garum de los romanos preparado a base de salazones para condimentar las comidas - datado en el siglo V y prácticamente inédito hasta el momento.
La Asociación
Actualmente, la Asociación está formada por doce empresas ubicadas en las localidades de Ayamonte e Isla Cristina (Huelva), Barbate, Chiclana y La Línea de la Concepción (Cádiz), y Málaga donde la industria de las salazones y los ahumados se configura como uno de los pilares fundamentales de la economía y el empleo. Concretamente, estas empresas son: Ahumados Ubago Denmark, Conservas Ubago, Ipessa, Herpac, Manuel Amorós e Hijos, Martín Dorado S. L., Pescados y Salazones La Higuerita, Pescatún Isleña, Pinchomanía, Salpesca, Selectos de Barbate, S. L. y Usisa.
Las doce empresas que forman la Asociación dan trabajo en esta actividad de las salazones a más de 750 personas. Por este motivo, esta industria cumple una importante labor social ya que se trata de un trabajo realizado en localidades altamente dependientes de la pesca y suponen un importante colchón en época de paro.
Las salazones elaboradas por las empresas integrantes de la Asociación se caracterizan no sólo por las excelencias de las materias primas empleadas, sino también por el tradicional proceso de elaboración puramente artesanal.
PIE DE FOTO
De izquierda a derecha, Elvira Álvarez, directora general de Pesca y Acuicultura; Isaías Pérez Saldaña, consejero de Agricultura y Pesca; Carlos Azcoytia, historiador gastronómico, y Juan Vázquez, presidente de la Asociación Andaluza de Fabricantes de Salazones y Ahumados.
Faro de Chipiona
