El presidente del Consejo Regulador de la Denominaciones Específicas Melva y Caballa de Andalucía, José Manuel Fernández González, ha recibido hoy el Premio de Andalucía de Agricultura y Pesca 2007, en un acto presidido por el consejero de Agricultura y Pesca, Isaías Pérez Saldaña. Con este galardón, la Junta de Andalucía ha querido reconocer la extraordinaria calidad de la producción conservera de las siete empresas adscritas al Consejo, acogidas al sello de Calidad Certificada, que representan aproximadamente una facturación anual de 13,5 millones de euros, con una transformación de 6.500 Tm de pescado.
Asimismo, con este premio se ha distinguido la destacada labor desarrollada por esta organización desde su constitución para dar a conocer la calidad de estos productos y los beneficios para la salud derivados de su consumo. Concretamente el pasado año, el Consejo llevó a cabo una campaña de promoción de estos productos mediante un autobús temático que recorrió las provincias de nuestra Comunidad, y en la que se realizaron unas 75.000 degustaciones de Melva y Caballa de Andalucía. Acción que supuso, igualmente, repartir unas seis toneladas de estas conservas artesanales. El éxito de esta iniciativa y su gran acogida entre los andaluces han llevado al Consejo a volver a poner en marcha una nueva edición que se realizará durante los meses de junio y julio.
Por otra parte en este mismo acto, se ha hecho una mención especial a la trayectoria de USISA, empresa miembro del Consejo Regulador; en representación de esta entidad ha asistido su fundador, Juan Vázquez Méndez.
Proceso artesanal
La producción de melva y caballa de las empresas adscritas al Consejo Regulador se caracteriza no sólo por las excelencias de las materias primas empleadas, sino también por el tradicional proceso de elaboración puramente artesanal, y sin la utilización de ningún producto químico, procedimientos que se recogen en el Reglamento del Consejo Regulador. Sólo las empresas que elaboran artesanalmente estas conservas, que no utilizan productos químicos en sus procesos, ni como aditivos o conservantes, y que sólo usan aceite de oliva o de girasol, pueden formar parte del Consejo Regulador. Estas características le han permitido acogerse al distintivo de la Junta de Andalucía de Calidad Certificada, sello que distingue a aquellos productos agroalimentarios que tienen un alto estándar de calidad contrastada y verificada.
El Consejo Regulador
El Consejo Regulador nace por la iniciativa de un grupo de empresarios de la conserva artesanal de Andalucía que, con el apoyo decidido de la Consejería de Agricultura y Pesca, deciden solicitar para estas conservas un distintivo de calidad europeo, la Indicación Geográfica Protegida o IGP, que se corresponde en la reglamentación española con la figura de la Denominación Específica que actualmente ostentan estos productos.
Con la aprobación del Reglamento de las Denominaciones Específicas Caballa de Andalucía y Melva de Andalucía, estas conservas se convirtieron en el primer producto del sector pesquero andaluz que accede a una Indicación Geográfica Protegida (IGP) y al reconocimiento del distintivo de calidad europea.