
En días pasados, en los locales sociales de la Casa de Castilla La Mancha tuvo lugar un acto de Homenaje póstumo al que fuera su Vicepresidente D. Benito Martín–Montalvo Recio fallecido el 11 de febrero de 2025. Al acto que fue organizado por la Casa de Castilla La Mancha se le unió el Hogar Navarro en Sevilla y contó con la participación de la Asociación Literaria ITIMAD además de los socios de ambas Casas Regionales y familiares de Benito.
Todos los participantes que tuvieron el honor de dedicar unas palabras a Benito, incluidos sus familiares, todos coincidieron en su recuerdo.
Don BENITO MARTÍN-MONTALVO RECIO (Santa Cruz del Retamar (Toledo) 14-10-1943, Sevilla 11-02-2025. Manchego de Pro. Hombre serio, meticuloso, y generoso, amigo de sus amigos, no escatimaba en ningún momento de su ayuda, ameno conversador, trabajador infatigable, sus grandes pasiones: la Casa de Castilla La Mancha de la que era Vicepresidente, la Filatelia, los Libros y la Arqueología y sobre todo su gran familia, 7 hijos, que forjó con su esposa ya fallecida doña Isabel Sánchez.
Su espíritu y bonhomía resonarán por siempre en nuestros corazones, recordándonos que debemos atesorar cada momento y aferrarnos a los lazos familiares.
Pese a su amor por Sevilla, nunca olvidó sus raíces manchegas, siempre puso que volvería. Mantuvo siempre vivo su vínculo con Castilla-La Mancha, tanto que se unió a la Casa de Castilla la Mancha en los 80. donde encontró grandes amigos y compartió innumerables momentos. Fue vocal,secretario y vicepresidente, demostrando que en la Casa,además de hablar, también se trabajaba.
Era un apasionado del fútbol, del Real Madrid en particular, aunque,curiosamente,de Sevilla que prefería al Betis, tal vez solo para llevar la contraria a Arturo y Fernando
Finalizó el acto con unas palabras del Presidente de Casa de Castilla La Mancha don Juan Carlos López Tello que elevó una plegaria en su honor: Benito, recibe toda nuestra eterna gratitud, por las continuas muestras de amistad y cariño que nos prodigaste a lo largo de tu vida.
Foto Antonio Rendón Domínguez

