El Santísimo Cristo de la Vera-Cruz y María Santísima de las Angustias Coronada de la ribereña localidad sevillana de Alcalá del río, vuelven a bendecir al pueblo con su devotísima presencia en sus milenarias calles. Al infinito poder del Santísimo Cristo de la Vera-cruz, volvemos a acogernos con la divina intercesión de la Madre de Dios en la localidad.
Regresa la procesión de madrugada como tal, en todo su esplendor, y los cruceros rebosan una ilusión indescriptible tras este paréntesis de oscuridad. Los Amantísimos Titulares volverán a llenar todo de luz, como siempre hacen. Y es que "La Bajada" manifiesta un verdadero signo de fervor y solemnidad; del peso de los casi seis siglos de esta Hermandad y del compromiso inquebrantable de sus Hermanos, pues en el cortejo participan cruceros y cruceras de todas las edades, además de multitud de devotos propios y foráneos tras nuestras Sagradas Imágenes. Cientos de cirios en la oscuridad de la noche, el silencio alterado exclusivamente por el rumor de pisadas, como describía García Posadas; y los Titulares más cercanos que nunca, demostrando su eterna realeza con el único atributo de la sencillez.
Un referente y un acto marcado a fuego en el calendario cofrade y en el sentir devocional de la provincia.
"La Bajada" parte desde la Real Ermita de San Gregorio de Osset, a la Iglesia Parroquial de Santa María de la Asunción, para la celebración de los cultos en Honor del Santísimo Cristo de la Vera-cruz y se celebrará en la noche del sábado al domingo, 15 de mayo a la una de la madrugada.
Esta procesión conocida popularmente como de “bajada”, es debido al desnivel orográfico, entre la Real Ermita de San Gregorio de Osset y la Sta. Iglesia Parroquial de Sta. Mª de la Asunción de la villa. Foto Antonio Rendón Domínguez