El matador de toros Miguel Báez ‘Litri’ y el cantaor Francisco José Arcángel Ramos, es un cantaor de flamenco español conocido artísticamente como “Arcángel en la Fundación Cajasol de Sevilla.
Esta nueva cita estaba marcada por un denominador común: el sentimiento ‘choquero’ de ambos protagonistas que se asomaron al escenario del teatro de la Fundación Cajasol y bajo la batuta de José Enrique Moreno, moderador habitual de estos clásicos ‘vis a vis’ que suman el testimonio de un torero al de una personalidad del mundo del espectáculo o del panorama cultural.
El último encuentro se había celebrado en mayo, después de haber tenido que aplazar el proyectado encuentro de Litri y Arcángel en noviembre de 2020, debido a la modificación de horarios impuesta por las restricciones del Covid-19. Pero nunca es tarde si la dicha es buena. La ovación del público rubricó el interés que había despertado la cita.
Al inicio de la tertulia, ambos manifestaron su interés común por sus respectivas profesiones, manifestando que «el mundo del toro y el del flamenco tienen muchos vínculos; yo me inspiro mucho en la música y comparten muchas connotaciones» explicó Litri confesando que, en la intimidad del campo, se había hecho acompañar de cante toreando para sí mismo. Eso sí, el diestro descartó que la experiencia fuera extrapolable a las plazas de toros afirmando que «se han hecho intentos pero creo que debe ser algo para uno mismo, en la plaza no he llegado a sentirlo así». Por su parte, Arcángel replicó que «no es fácil, pero pensándolo bien, dedicándole tiempo, se podría conseguir, aunque es difícil sustituir a una banda; debe ser alguien conocedor del toreo, con la suficiente sensibilidad», señalando que «hay que unificar posturas».
A lo largo de la conversación, el moderador evocó la figura del primer Litri, abuelo del actual Miguel Báez, como aficionado flamenco. El propio torero comentó que su padre «siempre ha sido muy aficionado a los fandangos de Huelva, todos los toreros hemos tenido mucha vinculación con todos los artistas y en el caso de Arcángel, además del cante y el toreo, nos unen muchas cosas». A lo que el cantante onubense respondió, diciendo que « se trata de una cuestión de sensibilidad ya que en estas profesiones lo importante es grabar a fuego nuestras experiencias, somos personas que hemos hecho de nuestra inquietud y amor por algo nuestra profesión». No obstante, el cantaor fue más allá al hablar de «jerarquía y liturgia», trazando nexos comunes entre ambas actividades y reconociendo que a veces, echa en falta esa rectitud en el mundo del flamenco ya que las cosas funcionan cuando están en orden.
Cuando la charla ya iba encarando su final, ambos protagonistas, coincidieron en que «uno de los valores más importantes de una sociedad moderna deben ser sus tradiciones y debemos sentirlas y transmitirlas a los nuestros; si somos capaces no debemos temer nada», sentenció Litri. Por su parte, el cantaor añadió que «erramos si queremos explicar todo desde una única perspectiva; yo puedo respetar al que no soporta el dolor de un animal pero eso es sacrificar el todo por la parte».
Foto Antonio Rendón Domínguez