El Rey, que ha recorrido unos 70.000 kilómetros en viajes oficiales durante los últimos seis meses, dijo: "no he faltado a ninguna de nuestras citas en 21 años y tampoco estaba dispuesto a estar ausente en esta, en la que, además, España es el anfitrión".
Doña Letizia y Elvira Fernández apostaron por el color negro para la ceremonia.
Los Príncipes de Asturias estuvieron junto a los Reyes en la ceremonia de inauguración de la XXII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno celebrado el pasado fin de semana en Cádiz. La Princesa, que sólo estuvo unas horas en la capital gaditana y volvió a Madrid, optó para la ocasión por un look sobrio y elegante en color negro, igual que Elvira Fernández Balboa, la mujer del presidente Rajoy.
Los jefes de Estado y Gobierno acompañados de los Reyes y Principes de Asturias . posaron para hacerse la foto de familia con los asistentes a la Cumbre durante la visita que realizaron al oratorio de San Felipe Neri en Cadiz, sede de las Cortes Constituyentes de 1812.
Junto al Rey, se encontraban el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, y su mujer, Elvira Fernández Balboa. Tanto doña Letizia como Elvira Fernández apostaron por el siempre sobrio y elegante color negro para la ceremonia.
Doña Letizia eligió para este acto un vestido negro por encima de la rodilla, con aplicaciones de pedrería y lentejuelas, que combinó con chaqueta con solapas y manga larga del mismo color, peep-toes en tono beige y bolso de mano de raso.
Por su parte, la Reina eligió una chaqueta con flores estampadas en plata sobre fondo gris y una falda de raso de gris más oscuro.
Esta es la segunda vez que Felipe hace de anfitrión junto a su padre en una Cumbre Iberoamericana en España, después de que se estrenase en la celebrada en Salamanca en 2005.
Los Príncipes acudieron a la cena que tuvo lugar en el Parador Nacional, si bien doña Letizia, una vez concluidos los actos institucionales del viernes , regresó a Madrid, según la agenda de la Casa Real. Durante la velada, a Letizia se la vio conversar animadamene con el presidente de Honduras, Porfirio Lobo, quien, sentado a su derecha, sonreía constantemente en su charla con la Princesa.
El Rey, que conto en esta ocasión con el apoyo de la Reina y de los Príncipes de Asturias, llegó el jueves por la noche a la capital gaditana para participar en la reunión de internacional de Jefes de Estado y de Gobierno. Don Juan Carlos puso rumbo en avión a Jerez y, desde allí, se desplazó en automóvil hasta Cádiz para alojarse en el Parador Nacional, residencia de la delegación española durante la cumbre y escenario de los encuentros bilaterales entre el soberano y otros mandatarios.La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, asistio por primera vez a una cumbre iberoamericana, el presidente de México, Felipe Calderón, que se despide en Cádiz de las cumbres iberoamericanas ya que concluye su mandato el próximo mes de diciembre, el presidente panameño, Ricardo Martinelli, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, quien viajó acompañado por el expresidente del Gobierno español José María Aznar, así como los jefes de Estado de Ecuador, Rafael Correa, de Bolivia, Evo Morales, y de Portugal, Anibal Cavaco Silva, entre otros. La presidenta de Argentina, Cristina Fernández, y de Uruguay, José Mujica, no asistio por enfermedad, y tampoco estuvieron en Cádiz los de Venezuela, Hugo Chávez, ni Cuba, Raúl Castro.
El viernes por la mañana, el Rey mantuvo encuentros previos a la Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno en el Parador de Cádiz con el Presidente de Colombia, Juan Manuel Santos y el Presidente de Ecuador, Rafael Correa. Además, a mediodía ofreció un almuerzo al presidente de México, Felipe Calderón, acompañado por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.
Por la tarde, los Reyes y los Príncipes de Asturias se trasladaron al Oratorio de San Felipe Neri, donde acompañados por el presidente del Gobierno y su esposa recibieron a los Jefes de Estado y de Gobierno y al Secretario General Iberoamericano, asistentes a la Cumbre. Ya por la noche, y una vez inaugurada oficialmente la XXII Cumbre Iberoamericana, don Juan Carlos ofreció una cena en el Parador de Cádiz a los Jefes de Estado y de Gobierno, donde anunció que tendrá que volver a ser operado de la cadera izquierda la semana que viene.
El Rey, que ha recorrido unos 70.000 kilómetros en viajes oficiales durante los últimos seis meses, ha añadido: "no he faltado a ninguna de nuestras citas en 21 años y tampoco estaba dispuesto a estar ausente en esta, en la que, además, España es el anfitrión".