La francesa Martina Eyrolles llegó hace un año a la Jarandilla, en Castellar de la Frontera, con un curioso proyecto turístico ambiental con el que ofrecer una manera distinta de emplear el tiempo libre.
Y es que en el centro de Descanso Activo La Jarandilla, rodeado de fresnos y helechos a orillas del río Guadarranque, camuflado en el interior del bosque de ribera, se levanta un poblado indio compuesto de diez tipis con capacidad para sesenta personas en el que vivir una experiencia distinta y casi desconocida en el sur de Andalucía.
La instalación ambienta y reconstruye una comunidad Cherokee de América del Norte en los montes andaluces, donde no hubo indios pero sí un entorno natural envidiable. El lugar ofrece la posibilidad de vivir una experiencia completa como poblado indio con sus tipis inífugos con suelos de madera, sus hogueras, canoas para pasear por el río, arcos, pieles y dianas que suponen una atractiva oferta para disfrutar en familia, con compañeros de trabajo o con amigos.
Unos precios asequibles y una oferta variada para todo tipo de eventos: actividades de incentivos para las empresas, cumpleaños para niños, excursiones escolares, e incluso, despedidas de solteros y solteras.
Junto a la experiencia Cherokee, se pueden optar a multitud de actividades relacionadas con el entorno natural, paseos a caballo, senderismo, observación botánica, escalada, composición de perfumes naturales, masajes e incluso clases de yoga en plena naturaleza.
Toda la información en www.puebloindio.es y en el teléfono 679 26 17 53.
Faro de Chipiona
