La Catedral de Sevilla ha acogido este sábado 12 de septiembre a las 9 : hora de la mañana, la ceremonia de toma de posesión de los 13 nuevos canónigos designados por el arzobispos, monseñor Asenjo, el pasado mes de junio. Con estos nombramientos, el Cabildo Metropolitano alcanza un total de 29 de los 35 miembros establecidos por los estatutos de la institución, solucionando así buena parte de los problemas de organización que tenía hasta este momento. Los nuevos canónigos son: Antonio Bueno Ávila, Ignacio Jiménez Sánchez-Dalp, Marcelino Manzano Vilches, Rafael Muñoz Pérez, Borja Núñez Delgado (que servirá en el oficio de Canónigo Penitenciario), Manuel Palma Ramírez, Álvaro Pereira Delgado (que servirá en el oficio de Canónigo Lectoral), Adrián Ríos Bailón, Antonio Rodríguez Babio (que servirá en el oficio de Capellán Real), Isacio Siguero Muñoz, Ramón Darío Valdivia Giménez, Miguel Vázquez Lombo y Antonio Vergara González.
Además de estos nombramientos, monseñor Asenjo ha dispuesto también la designación de Manuel Cotrino Bautista como Canónigo Chantre, a quien le corresponderá cantar las kalendas de la Inmaculada Concepción, Natividad del Señor, san Fernando, Corpus Christi, entre otras y, a Manuel Soria Campos como Capellán Mayor de San Fernando. Ambos continuarán con sus oficios de Capellanes Reales. Al mismo tiempo ha nombrado a Carlos Navascués Nocito, como Canónigo de Honor.
La toma de posesión, presidida por el arzobispo, ha consistido en una reunión capitular del Cabildo. Después de las oraciones iniciales se han presentando aquellos sacerdotes que han sido elegidos. Más tarde, se ha procedido a la toma de posesión en el Coro, con la sesión en los sitiales que corresponden a los nuevos canónigos. La ceremonia ha finalizado con el juramento de levantar las cargas, que, según los estatutos, corresponde a los canónigos.
"Felicito de corazón a estos hermanos nuestros que acaban de tomar posesión de su canonjía, por la confianza que les ha demostrado el arzobispo al nombrarlos. Felicito al excelentísimo Cabildo que hoy se enriquece con el compromiso explícito de estos hermanos de entregarse al servicio de la Catedral" ha resaltado monseñor Asenjo.
Monseñor Asenjo ha exhortado a los nuevos canónigos a cumplir ejemplarmente el ministerio que la Iglesia pone en sus manos: "No hay ministerio en la Iglesia que no consista en servir. Es un honor ser canónigo, pero sobre todo un servicio. Jesús nos enseña a coger la jofaina y la toalla para lavar los pies, para servir. Siervos y servidores de nuestros hermanos".
El arzobispo, durante su intervención, ha detallado cuál es la función que deben cumplir los canónigos: "El Cabildo tiene una función de carácter cuasi material, cuidar del edificio, del inmueble de la Catedral, en nuestro caso, de la tercera Catedral más grande de toda la cristiandad y una de las diez catedrales más hermosas de todo el orbe cristiano".
Ha mencionado que la Catedral de Sevilla posee también un riquísimo patrimonio mueble, a la vez que felicitó a los canónigos de Sevilla que han cuidado siempre con mimo toda la estructura: "Tal vez cabría incrementar la función pastoral, evangelizadora de los bienes culturales de esta Catedral".
Por último, ha relatado que a la Catedral de Sevilla han llegado legiones y legiones de personas, cristianos, no cristianos, que venían de otros lugares. "Dios quiera que pronto podamos encontrarlos de nuevo entre nosotros. Tal vez cabría ver la forma de incrementar esta dimensión evangelizadora, en los audios, en los paneles iluminados, en los folletos de mano, con discreción, con educación, sin proselitismos, con elegancia, mostrar en esos instrumentos a Jesucristo, como único salvador".
Segundo nombramiento de Asenjo
En junio de 2013, el arzobispo, monseñor Asenjo, realizó su primer nombramiento de canónigos. El prelado otorgó la canonjía a los sacerdotes Ramón Díez de la Cortina Consuegra y Antonio Sayago García (ambos ya jubilados), Antonio Fernández Estévez (fallecido), Eduardo Martín Clemens, José Lora Corento, Geraldino Pérez Chávez, José Luis García de la Mata Calvo, Antero Pascual Rodríguez, Manuel Sánchez Sánchez, Francisco Román Castro y Francisco José Ortiz Bernal. Desde entonces, las jubilaciones, que se producen al alcanzar 40 años de servicio en la Catedral antes de cumplir los 75 años; y los que pasan a la condición de emérito, al celebrar los 75 años; además de los fallecimientos recientes, han deparado que prácticamente se iguale el número de capitulares en activo con los que no tienen obligaciones.
La Catedral de Sevilla es de las pocas que cuenta con una celebración diaria de oficio coral; además de misas en la Capilla Real y otras eucaristías que son atendidas por los capitulares.
Foto Antonio Rendón Domínguez