En torno a las 06:30 horas comenzaba el repique de campana, que anunciaba la procesión matinal del Rosario de la Aurora,de la Virgen de los Dolores de la Hermandad Servita del Santo Entierro de Cristo para que alas 07:00 horas como estaba previsto se abriera la puerta principal de la Iglesia Parroquial de Santiago Apóstol de la localidad de onubense de Gibraleón, para realizar el cortejo, en un acto enmarcado en el 75º Aniversario de la Bendición de la Madre y Señora de los Dolores.
A paso firme, de costero a costero, portada por sus hermanas y devotas, la dolorosa en unas andas, que hacia su presencia en el porche del templo con los primeros rayos de luz del día, al son del magnifico Coro Amigos de la Navidad que armonizaron toda la procesión en un brillante acto.
Un cortejo que abrió la Cruz Parroquial flanqueada por dos faroles de guías, tras los cuales caminaban las distintas representaciones de hermandades de penitencia y gloria. A continuación los miembros representativos de la junta de Gobierno y Comisión Organizativa del 75º Aniversario, seguidamente representaciones del Ayuntamiento de Gibraleón. Presidió la procesión el Rvdo. Roberto Abeja Cortes, párroco de la localidad, junto con el presidente de la Corporación Jesús Calvo Donaire .
El momento más emotivo fue a la llegada a su casa Hermandad,que despertó el entusiasmo, de los allí presentes dedicándole toda clase de honores y tributos para inmortalizar el momento. Con una lluvia de pétalos literal rociaba la corona de “Reina Servita”, acompañada de vítores y plegarias sin descanso...
Así, con las última estrofa de la Salve, entraba de nuevo por el porche de la parroquia las andas del paso. Alrededor de casi dos horas estuvo la venerada Imagen recorriendo las calles de la feligresía, cuando las andas del paso se asentaron en el piso del interior del templo. Se recogía así, la pionera Medalla de Oro de la Villa culminando un rezo del Santo Rosario inolvidable.
Acto seguido a las 09:00 horas se llevó a cabo la Eucarística dominical, con una iglesia muy cuidada que estuvo abarrotada de fieles que fue cantada por el brillante coro de Amigos de la Navidad. Tras la misa y los actos litúrgicos la Hermandad procedió al desayuno que expuso en la plaza de Santiago para todas las personas que madrugaron para acompañar a la Virgen de los Dolores.
Fotos Antonio Rendón Domínguez