Que bonita flor la corrigüela, que gracia debió tener el que le puso ese nombre, imagino que debió ser gaditano, ¿Por qué no, Celestino Mutis? Se paró, miró y dijo tu eras la que deje en la zapata de aquel vallado ayer- ella, viendo los primeros rayos de la mañana abrió sus campanillas y sonriendo le contestó (anda ya guasón) este, con salero le dijo -Pues te llamaré corrigüela- y con ese singular nombre se conocen hoy una gran cantidad de florecillas trepadoras del campo.
También desde entonces este nombre acompañará las noticias, pues como ellas corren y vuelan. A la noticia, también se le otorgaron otros motes de mensajeros véase en la RAE, la palabra Correveidile, que está aun muy vigente. Pero la noticia no tiene por que ser escrita, pueden ser verbal, por señas, imagen o impresas. Pero con gran variedad de mensajeros, como el ciervo, el soplón, el perro, el pelota, el chivato, el lameculo, el acolito, el alcahuete, el chismoso, el maipiolo, el mala lengua, todos ellos pueden dar la noticia en distintas formas, pero el peor de todos es, el que con la noticia falta a la verdad, el mentiroso.
Cada vez me sorprendo más la forma tan rápida que se suceden las cosas en este país, todo pasa de ser noticia a olvidarse en un día: Las noticias corren y vuelan, como la corrígüela (Convólvulos Arvenses). De manera alocada el mensajero debe y está obligado a conseguir, esa noticia que abecés (quiero pensar que solo abecés) es un mensaje transferido por algún superior, así la siguiente noticia borrará la anterior del saturado lector, radioyente o televidente, estos flipan con tantas noticias. Se pasan páginas o se eclipsan noticias, bien por nuevas amenazas de ETA, de Ál Qaeda, del género rosa o deportivo. Hoy tenemos futbol los siete días de la semana, pero eso no significa que sea una cosa premeditada por el Gobierno, no, (dudo que piensen tanto).
Hay quienes evocan las noticias de antaño, cuando una canción de Nat King Cole, podía estar en el candelero varios años y hoy no aguantan ni siquiera un verano, por ejemplo: El carro de Manolo Escobar, ya saben el de Almería, no el de la escoba de plata, se llevó al menos cinco años cantándose. Pero hoy ni por suerte durarían un mes. Hoy para poder estar en el boca a boca de las gentes hay que estar en radio, televisión o prensa, pero esto cuesta un pastón.
Solución, comprar medios de comunicación, o periodísticos, ¿quienes pueden hacerlo? Los que manejan nuestros dineros y se hacen con sus servicios, pero cuando les falta piden ampliación de créditos y el que venga atrás que arree. Jamás han existido tantos periodistas como ahora, ni tanta falta de información veraz.
Ejemplo, existen Ayuntamientos en la ruina mas absoluta con Teles propias, (por lo visto se terminaron los seguimiento de la legalidad vigente), se mantienen radios con doctrinas y no religiosas precisamente, y hasta se permiten crear periódicos semanales como si en estos pueblos de pena, penita pena, hubiesen noticias que dar, que no sean callarse la boca. Pero es hora de dar noticias, de informar de lo que sea, para que así sepamos que están ahí, -de sobra lo sabemos- con los impuestos que pagamos y los pocos servicios que recibimos ya me contaran, haber el próximo año quien puede pagar la contribución, IBI para los amigos. Hoy en muchos pueblos de la provincia y como una plaga de termitas, se está extendiendo con gran amplitud estos correveidile o celestinos de la noticia, y no digamos en el resto del país, debido a las necesidades económicas que imperan en el reino, el hambre hace hablar a las piedras, y lo peor al mejor postor. Una Tele, una Radio y un Periódico, un Chávez. (Exprópiese) corre y vuela, Que dios nos coja confesados.Manolo Ávila Duran