La Consejería de Gobernación y Justicia de la Junta de Andalucía ha asegurado este jueves que el cobro por parte de los abogados sevillanos de las guardias y oficios "está garantizado", y ha puesto de manifiesto que "en breve"se iniciarán los pagos, saliendo así al paso de las declaraciones efectuadas por el decano de los letrados sevillanos, José Joaquín Gallardo, quien no ha descartado la convocatoria de movilizaciones si la Junta no paga antes de que concluya el presente año 2010 los 3.626.727,56 euros que "adeuda" por las guardias y oficios practicados durante todo el año.
En este sentido, fuentes del departamento que dirige Luis Pizarro han explicado a Europa Press que ha existido un problema técnico, pero que éste ya se ha solucionado, por lo que el cobro "está garantizado" y "en breve" se iniciarán los pagos, todo lo cual "lo sabe perfectamente" José Joaquín Gallardo y el Consejo Andaluz de Colegios de Abogados, "con el que se ha estado en permanente contacto".
Y es que el decano de los letrados sevillanos ha reivindicado el pago "inmediato" de las cantidades que la Junta "adeuda" a los abogados hispalenses, "a quienes no se ha pagado aún ni una sola de las guardias prestadas durante este año, y a los que también se debe los asuntos de oficio acreditados en el segundo y tercer trimestre del año", todo lo cual totaliza 3.626.727,56 euros.
Gallardo ha precisado que la "deuda" total contraída por la Junta con los abogados sevillanos se corresponde con las 26.461 asistencias prestadas a detenidos en las sedes policiales y judiciales durante los primeros nuevos meses del año, así como con los 18.432 asuntos judiciales en los que los letrados intervinieron de oficio durante los dos primeros trimestres. Al hilo de ello, y tras explicar que hasta 1.764 letrados prestan guardias en la provincia, y 1.931 asumen asuntos de oficio, ha aseverado que "la paciencia tiene un límite que ya se ha sobrepasado con creces", considerando "escandaloso y lamentable que se haya ido acumulando esa deuda durante todo el año ante la pasividad de la Consejería".