
Un hacker llamado Aladdin infecta el Real Teatro de las Cortes con el mágico virus de la esperanza que convierte los sueños en realidad.
Los virus mas terrenales de la lluvia y la crisis económica impidieron el lleno que se preveía tras los antecedentes de Peter Pan en el mismo escenario.
Tras el éxito cosechado la temporada pasada con Peter Pan, la productora Theatre Properties traía este fin de semana al Real Teatro de las Cortes de San Fernando (Cádiz), Aladdin El Musical, basado en el clásico de la literatura universal bajo la dirección musical de Cristina Fargas que además es la autora del libreto, la puesta en escena y la creatividad artística.
Con una puesta en escena rodeada de tecnología multimedia, donde la luz, el color y los efectos especiales compartían protagonismo con un remozado Aladdin, interpretado por Miguel Antelo, convertido en un hacker informático, la Princesa Chazmine (Silvia Villau), el maléfico Jaffar (Miguel A. Gamero), la bella narradora Sheherezade (Isabel Malavia) y como no el travieso Genio (Israel Quintana).
A lo largo del musical pudimos encontrar numerosos guiños a esta especialidad de las artes escénicas, así como a los éxitos pasados que la misma compañía ha paseado por los escenarios nacionales e internacionales.
Con una acertada coreografía las diferentes danzas interpretadas fueron poniendo en situación a un expectante público que desde sus asientos identificaba las melodías y canciones con los personajes que las interpretaban, pues mientras Aladdín tomaba como base la música pop, Chazmine con sus baladas románticas, contrarrestaba el rock más heavy de Jaffar.
Sin duda nuevamente Theatre Properties ha sembrado, la ilusión y el interés de la familiar audiencia, por una opción cultural como es la de un teatro en eterna crisis, y a la que el ingenio de Cristina Fargas con su actualización del clásico cuento revitaliza con un lenguaje adaptado a los nuevos tiempos.

