A las 10 de la noche del pasado viernes, 14 de Julio se celebró en la Parroquia de la O de Chipiona una misa por el alma de Rocío Jurado. Fue un acto íntimo y familiar, un motivo de encuentro para toda la familia que por primera vez volvían a reunirse en Chipiona después del entierro de Rocío Jurado.
El primero en llegar por Ortega Cano, acompañado de su hermano Eugenio. Recibió muchas muestras de afecto de los chipioneros , a los que saludó emocionado. Rocío Carrasco llegó después , siempre del brazo de Fidel Alviac que se ha convertido en su apoyo incondicional en estos duros momentos. Con ella llegaba su tía Gloria Mohedano, con su marido José Antonio Rodríguez y sus hijas, Amador Mohedano y su esposa Gloria y su hija Rosario. Gloria fue muy cariñosa con su sobrina Rosario a la que cogió por la cintura para animarla.
La familia de Ortega Cano quiso acompañarlo en un día tan especial, su hermana Maria del Carmen que también está muy vinculada a Chipiona, donde veranea, con su esposo y sobre todo la presencia de doña Juana Cano, madre del diestro, que llegó muy afectada y sin poder contener las lágrimas.
La misa fue presidida por el vicario parroquial, padre José Ramón Martínez de Tobillas, quien en su homilía recordó Rocío vive entre nosotros, ella fue fiel devota de la Virgen de Regla y hoy la Virgen de Regla está con ella. El alcalde de Chipiona, Manuel García, acompañado de toda la corporación municipal realizó una ofrenda de rosas blancas. Como portavoz de la familia la hija menor de Gloria, Rocío Rodríguez dio las gracias en nombre de todos por el cariño que les ha demostrado Chipiona.
A la salida de la Iglesia se produjeron aplausos espontáneos del público que fueron correspondidos con las gracias continuadas de todos los miembros de la familia Jurado y Ortega Cano