La Consejería de Educación ha adoptado de forma unilateral la decisión de no ofertar las vacantes provenientes de las jubilaciones LOGSE del año 2.006, en los concursos de traslados del profesorado andaluz, reduciendo aproximadamente en unas 1.000 plazas, la oferta de vacantes.
El sindicato CSI- CSIF ha rechazado en Mesa Sectorial esta medida y considera que es un duro golpe y un ataque frontal a los derechos del profesorado, que lleva muchos años intentando obtener destino en la localidad donde quiere vivir y un año más puede ver frustradas sus expectativas.
Para el sindicato independiente esto es consecuencia de la política de parcheo que está llevando a cabo la Consejería que no da solución a los problemas existente y si genera nuevos. La Consejería ha querido vender a la opinión pública la estabilidad de las plantillas de los centros, intención muy loable, colocando a profesores desplazados, suprimidos, comisiones de servicio, provisionales e interinos por dos años y ahora no puede sacar todas las vacantes para no producir mucha movilidad, aunque la consecuencia sea que miles de profesores tengan que seguir viviendo a cientos de kilómetros de sus familias o tengan que hacer varias horas diarias en coche, para poder desarrollar su trabajo y poder tener un mínimo de vida familiar.
Para CSI- CSIF la decisión tomada por la Consejería es impresentable, ataca de base en la conciliación de la vida familiar y laboral y pone en tela de juicio la teórica voluntad de la Administración de dignificar la labor docente.
CSI- CSIF ha dirigido un escrito a la Consejera pidiendo que reconsideren la decisión adoptada, que se haga un estudio riguroso de las plantillas de los centros educativos y saquen todas las vacantes que existan. La estabilización de las plantillas se hace mediante los concursos de traslados, que es el mecanismo legal establecido, y no con comisiones de servicio por programas de un tipo u otro.
Esperamos que la Consejera sea sensible a esta petición, en caso contrario nos veremos obligados a iniciar medidas de presión, porque CSI- CSIF no puede admitir de ninguna manera la falta de consideración hacia el profesorado y a sus condiciones laborales.