Chipiona, 13 de abril de 2012.- El Alcalde de Chipiona ha respondido hoy al PSOE que el plan de ajuste no condena a Chipiona por diez años, sino que la población ya estaba condenada previamente por una gestión socialista que ha dejado una deuda de setenta millones de euros.
El grupo socialista tendría que haber dicho, según Peña, que dejó una deuda de 30 millones de euros a proveedores, que los va a pagar el grupo popular, y que se le devolverá al banco con un 5% de intereses, lo que permitirá a los proveedores conservar sus empresas, realizar nuevas inversiones y mantener los puestos de trabajo.
A estos treinta millones de euros, ha continuado, hay que sumar treinta más por la deuda a la seguridad social y seis más por devoluciones de subvenciones y facturas que nos están esclarecidas, con lo que la cifra se sitúa en setenta millones de euros. Antonio Peña, ha pedido honestidad al partido socialista y que reconozca que es su gestión la que ha condenado a Chipiona a esta situación.
El primer edil ha querido dejar claro que el plan de ajuste no se va a basar en el despido de personal, ni en la subida de impuestos o la reducción de inversiones como ha publicado el PSOE.
Respecto al personal municipal, ha apuntado que se van a amortizar las plazas de los trabajadores que se jubilen en los diez años siguientes, porque no existe capacidad para mantener la plantilla existente y hay que adaptarla a las verdaderas necesidades de la población.
El plan de ajuste tampoco contempla subidas de impuestos, ya que el actual equipo de gobierno, ha dicho, incluso ha bajado el IBI.
Antonio Pela ha afirmado que se van a hacer inversiones, pero siempre que no produzcan un mayor endeudamiento a las arcas municipales.
Ha concluido que el plan de ajuste se ha hecho con criterio y con sentido común y que los próximos diez años va a haber que apretarse el cinturón para hacer frente a los setenta millones de deuda que ha dejado la anterior gestión socialista.