El castillo de Chipiona está asentado sobre una roca del antiguo barranco existente en este lugar, que baten las olas del mar, junto a la muralla que cubre el antiguo acantilado de la zona que va desde la Cruz del mar hacia las Canteras.
Es de planta cuadrada, tiene dos plantas que se cubren con bóvedas de arista. Las ventanas son ojivales, y en la parte superior tiene una torre también cuadrada. Esta fortaleza ha sufrido muchas transformaciones hasta su adaptación en Hotel para veraneantes. Desde 1.989, fecha en la que se cerró el Hotel, se ha encontrado en estado de abandono y ruina, mientras que el Ayuntamiento y una empresa hotelera se disputaban la posesión de él. Actualmente es propiedad de nuestro Ayuntamiento desde el año 2.001.Ya restaurado, es sede del centro de interpretación de "Cádiz y el Nuevo Mundo".
Origen.
Su origen es dudoso, en su emplazamiento o cerca de él hubo un castillo que algunos hacen remontar a una época próxima a los romanos con más fantasía que argumentos sólidos.
Manuel Jurado Domínguez
Investigador de Historia Nº 500/97
Córdoba 28 de abril de 1997
LIBRO: Resumen del antiguo Santuario de Nuestra Señora de Regla y su Titular.
Con motivo a la restauración de su Templo. Seguido de una corona Poética consagrada al mismo objetivo.
Cádiz.- Imprenta, Librería y Litografía de la Revista Medica, á cargo de D. Juan Bautista de Gaona.
Plaza de la Constitución, Numero 11.- 1852.
Esta villa hallase situada en la costa del Atlántico, entra el Puerto de Santa María y el S.O. de Sanlúcar de Barrameda. La población primitiva estuvo emplazada en el sitio próximo a la roca de Salmedina, cuyo arrecife sobresale a bajamar delante de la villa.
Turris Coepione, como la llamara Estrabón y Pomponio Mela, nombre del que provino Torre de Capión, pertenecía a la región de los Túrdulos y se alzaba sobre elevado peñasco que servia de faro a los navegantes. Sus ruinas se encuentran, sumergidas en el mar.
A un cuarto de legua de Chipiona, junto al monasterio de Nuestra Señora de Regla, en el mes de noviembre de 1694, habiendo batido el mar con terrible furia la playa cercana al promontorio de Regla, dejó al descubierto varios sepulcros de mármol, urnas cinerarias y monedas; de estos sepulcros se hicieron losas para solar la iglesia del Santuario, según consta en el viejo manuscrito que copia D. Pedro de Madrazo.