
Con profundo gozo y gratitud, la comunidad camiliana de Sevilla celebró el pasado fin de semana las bodas de diamante sacerdotales del Padre Jesús María Zurbano, en un acto cargado de emoción, memoria agradecida y espiritualidad viva. Seis décadas de fidelidad al carisma de San Camilo de Lelis, dedicadas por entero al cuidado de los enfermos y al consuelo de los que sufren.
La celebración eucarística tuvo lugar en la capilla de la comunidad camiliana, presidida por el propio homenajeado. En un ambiente entrañable y fraterno, el Padre Jesús compartió esta significativa efeméride rodeado de sus familiares, hermanos de comunidad, miembros de la Familia Camiliana Laica, voluntarios del Centro de Escucha, trabajadores de la Casa de la Salud, de la Fundación Asistencial San Camilo, y numerosos vecinos del entorno.
Durante la misa, cargada de simbolismo y recogimiento, los miembros de la Familia Camiliana Laica renovaron sus promesas como expresión de su compromiso con los valores evangélicos vividos desde la vocación laical, al estilo del buen samaritano. Igualmente, voluntarios y colaboradores reafirmaron su vocación de servicio, inspirados en el ejemplo del Padre Jesús, verdadero reflejo de la misericordia activa que caracteriza al carisma camiliano.
Uno de los momentos más emotivos tuvo lugar al final de la homilía, cuando el Padre Allan Chávez dio lectura a una carta enviada por el Hno. José Carlos Bermejo, Superior Provincial de los Religiosos Camilos. Ausente por encontrarse en Colombia acompañando a sus hermanos en una semana de Ejercicios Espirituales, el Hno. Bermejo escribió palabras de profundo reconocimiento:
“Gracias por tanta dedicación a esta viña del sufrir y de la esperanza. Gracias por cuanto has escuchado, haciendo tesoro en tu corazón del sufrimiento apalabrado por tantas personas contigo (...). Que Dios te siga bendiciendo. Sigamos tras las huellas de Jesús de Nazaret, con el referente en el Santo Padre Camilo.”
La música de la celebración corrió a cargo del Coro de Amigos de San Camilo, bajo la dirección de José Rodríguez Gallego. El grupo, formado por voces destacadas como las sopranos Lola Serrano y Ángela Sala, los tenores Tito Aldomar y José María Jiménez, las contraltos Encarna Rodríguez y Reye Pérez, y el propio Rodríguez como bajo y director, ofreció un acompañamiento litúrgico de gran sensibilidad y calidad artística.
El acto concluyó entre abrazos, palabras de cariño y gratitud hacia un hombre cuya vida ha sido ejemplo de humildad, ternura y entrega incondicional. Las bodas de diamante del Padre Jesús María Zurbano no sólo celebran 60 años de ministerio, sino todo un legado de compasión activa, fe sólida y servicio evangélico a quienes más lo necesitan.
Fotografía Antonio Rendón Domínguez

