Cayetano Rivera Ordóñez afrontaba el lunes 19 de abril una de las tardes más importantes de su vida. Pisaba por primera vez la Maestranza como matador de toros y para ello quiso rodearse de la gente que quiere, entre ellos, su hermano Francisco y su novia, Eva González.
En el callejón de la plaza de toros, Fran y Curro Vázquez, apoderado de Cayetano, junto a él Espartaco mentor y amigo personal de los hermanos Rivera. En la plaza mucha expectación volvía a los ruedos Julio Aparicio y Morante de la Puebla era el otro diestro, cuya polémica por las declaraciones sobre la medalla de Bellas Artes concedida a Fran Rivera aún se recuerda. En los tendidos el maestro Curro Romero, con su esposa Carmen Tello, Enrique Ponce con su buen amigo Miguel litri, Viki berrocal, acompañada de su hermana Rocío, y hasta la cantante Chenoa que no quería perderse la primera corrida de la feria de Abril. En barrera también estaba Raquel Revuelta con unos amigos, Cary Lapique, Antonio Romero de Los del Río, Alvaro Domecq con su mujer, los toreros Tomás Campuzano y Domingo Valderrama o el futbolista Joaquín.
Cayetano escogió un traje blanco, blanco y plata y como capote de paseo uno en color verde esperanza con la imagen de la Esperanza de Triana. Eva intentó pasar desapercibida en todo momento tras unas gafas de sol, e incluso intentó abandonar la plaza a última hora. Su nerviosismo, igual que el de Cayetano, era evidente y no pudo evitar fumar convulsivamente mientras esperaba la actuación de su novio, el último de la terna. Cayetano brindó el primero de sus toros a Francisco, su hermano y pidió que retiraran los micros para hacerlo en la intimidad, fundiéndose ambos en un abrazo muy emotivo que hizo romper a la plaza en un fuerte aplauso.
El segundo toro lo brindó a la plaza, la misma en la que su padre cosechó tantos triunfos, al igual que su abuelo Antonio Ordóñez. Fue una tarde de emociones y muchos nervios, no hubo trofeos pero sí destellos de toreo elegante y de empaque, ese que gusta en Sevilla, ese que lleva el sello Ordóñez. La plaza se quedó con ganas de Cayetano.