Los medios de comunicación comunitarios son una solución fresca, de base, para incrementar el pluralismo de los medios y la diversidad a lo largo de la Unión Europea. Su contribución a la cohesión social, a la alfabetización mediática, a la creatividad local, al diálogo intercultural y a la regeneración local muestran como las actividades del sector coinciden con los objetivos de la política Europa, según un informe del Comité de Cultura y Educación del Parlamento europeo. Este documento recoge que en el estado español hay 130 radios y tres televisiones comunitarias.
El informe recalca que es deseable un mayor acercamiento entre las instituciones de la UE y el sector de los medios comunitarios, unas iniciativas de comunicación de profundo carácter social, naturaleza ciudadana, sin ánimo de lucro y completamente ajenos al fenómeno de las radios comerciales ilegales o piratas.
Este reconocimiento contrasta con la marginación que ejercen las comunidades autónomas del estado y Gobierno central. Las primeras obstaculizan que los medios comunitarios puedan obtener licencias denominadas de gestión indirecta (las que no son para medios públicos), reservando todas las concesiones para medios privados en contra de lo fijado en la Ley General Audiovisual (artículo 26). Por su parte, el Ejecutivo ha paralizado en esta legislatura la Ley General Audiovisual, en la que se reconocían a las emisoras comunitarias explícitamente en una norma de rango estatal por primera vez en la historia de la democracia. El informe europeo señala que en España los medios comunitarios no pueden competir ni acceder a las licencias; hay poco apoyo público para el sector.
Precisamente en ésta línea, el documento del Parlamento recoge que hay muchas áreas en las que la política pública puede ayudar a los medios de comunicación comunitarios, como reconocerlos legalmente, tenerlos en cuenta en la transición de las señales analógicas a las digitales y apoyo público para desarrollar el sector, entre otras.
El coordinador del documento, Gonçalo Macedo, propone al Parlamento europeo que encargue un informe sobre el potencial de estas iniciativas ciudadanas para promover un diálogo público sobre los temas europeos a nivel local.
Apuesta por animar a estos medios a crear una asociación europea de medios comunitarios que represente al sector ante la UE y los responsables del diseño de las políticas europeas, así como sondear la posibilidad de que reciba las ayudas europeas a entidades culturales. Entre las recomendaciones, también se incluye la creación de un portal web de medios de comunicación comunitarios.
Finalmente, se destaca que a medio- largo plazo ha de aumentar el papel de los medios comunitarios en el escenario de medio europeo, por lo que el sector podría ser un vehículo importante para acercar la UE a los ciudadanos.